Buena parte de los ancianos que ingresan en las residencias de ancianos privadas en Valencia, lo hacen después de haber sufrido algún tipo de accidente en su vivienda habitual. A medida que la edad va avanzando, se pierden reflejos, fuerza muscular y también memoria. Estas pérdidas suelen ser la causa de la mayoría de los accidentes domésticos en los que se ven involucrados nuestros mayores.

El deterioro físico que supone la pérdida de fuerza es la causa por la que un leve tropezón o un resbalón, cosas que unos meses atrás no hubieran supuesto problema alguno, hacen que el anciano dé con sus huesos en el suelo por culpa de una alfombra doblada o una silla fuera de su sitio. Por este motivo, en las residencias de ancianos privadas en Valencia como la nuestra, nos ocupamos de que los espacios para caminar estén siempre libres de obstáculos y de que todos los baños cuenten con suficientes puntos donde los residentes puedan agarrarse.

Uno de los accidentes más frecuentes que ocurren en casas en los que los ancianos viven sin compañía suelen ser los incendios. La pérdida de memoria a corto plazo es la causa por la que se olvidan que dejaron en la lumbre una cacerola antes de que sonara el teléfono, a veces, cuando quieren recordar, la cocina está a en llamas. También la pérdida de memoria les hace olvidar si ya tomaron o no la medicación y repiten la misma toma hasta tres veces en un mismo día, lo que, en el caso de algunas medicinas, puede ser la causa de una sobredosificación importante.

En Centro de Mayores Ntra. Sra. de la Estrella cuidamos de nuestros residentes como si fueran miembros de nuestra propia familia.